sábado, 12 de diciembre de 2009


Mañana quiero llover, no que llueva.

Una gota de lluvia cayendo por mi cara, por la tuya, por la mía,

no importa,

nuestro rostros se confunden (en la sombra),

nuestro pies avanzan juntos (por la acera).


Mañana no quiero que llueva, quiero llover.

La última vez, me pareció perfecta.

Y ahora baja la niebla...

La última vez me (nos) empapé (empapamos) hasta los pies.

La última vez tiritabas, ahora ya ni tiemblas...

1 comentario:

Víctor dijo...

Y que la lluvia signifique lo mismo, y que todo sea como la ultima vez...